El pueblo de Lastras de Cuéllar ocupa la parte del león de los discos duros y tarjetas de memoria de este que escribe. Sus pinares, sus lagunas, su ribera y sus demás excelencias nunca dejan de ofrecer motivos de inspiración para el ojo y la cámara.
Además de haber motivos de un sentimiento, que diría Sabina, por ser el lugar donde uno hunde sus raíces.
Es por todo ello que uno se siente halagado al comprobar que en su magnífica web ha sido incluida una reseña a este blog. Y naturalmente agradecido.
Aunque son ya varias las fotografías de Lastras que aparecen en algunas entradas, he de organizar un no poco voluminoso archivo antes de lanzarme a una publicación digna del pueblo.
Entretanto valgan de muestra estas panorámicas.
Unos cielos únicos |
Sus humedales |
Y sus bodegas |
No hay comentarios:
Publicar un comentario